Nosotros

Desde que recuerdo, ando buscando respuestas, a veces incluso sin tener las preguntas. Transcurría el tiempo y cada vez estaba más ahogada en el mundo del “¿Por qué?”, necesitaba respuestas que no encontraba en ninguna parte y fue así como comenzó mi búsqueda interior. Cuando te presentas en ese espacio tan olvidado, tu inteior, es una sensación tan embriagadora como analgésica. Al principio caes en el error de creer que con el “despertar inicial” tienes todo el camino hecho, aunque rápidamente te das cuenta que estás en el inicio de un camino largo, a veces duro, pero es el camino de tu propia realidad interna. A los 11 años, mi madre nos llevaba, a mi hermano y a mí, a clases de Control Mental para niños. Recuerdo aquellos encuentros como algo especial, divertido y práctico para mis estudios. A los 12 años hice el seminario de 1ºnivel de Reiki y poco a poco más y más talleres, cursos y formaciones. A los 18 años, la vida me hizo un regalo en forma de enfermedad autoinmune. Lo que en un inicio era un “¿por qué a mí?”, se convirtió en un “gracias”, ya que gracias a ello, mi camino de búsqueda fue avanzando. Cada dolor físico me hacía entender una parte de mi estructura interna. Estudié 3 años de Naturopatía y al tiempo me dí cuenta que no era suficiente, tenía una herramienta para prevenir y aliviar diferentes patologías pero no llegaba a la causa (o al menos, no supe hacerla llegar), mi intención siempre fue sanar el Alma. Así, me formé en Péndulo hebreo, algo que me cautivó por los resultados que iba presenciando tanto en mí como en mi entorno y consultantes. Ví en esta herramienta un millón de posibilidades e incluso una vía de estudio e investigación. También me formé en Terapia Regenerativa, una formación intensa que te ayuda en tu proceso interno, adquieres una intuición precisa y te lleva a tener la capacidad de acompañar y guiar al paciente en su proceso de transformación de conflictos internos, viejos patrones etc, a través de la radiónica y herramientas vibracionales. Previo a esto, realicé una formación de 2 años en Registros Akáshicos, a través de las Orlas de Ramstec, lo que me llevó a realizar Sanación Kármica del Alma a través de las Orlas de Ramstec. A día de hoy, estoy muy feliz por el camino recorrido y emocionada con el que aún queda por recorrer y está ahí, esperando a ser vivenciado. A lo largo de los últimos 10 años, he pasado consulta en Centro Anaga. El contacto diario con las personas y sus necesidades o carencias, me ha facilitado el ver la gran cantidad de respuestas que como seres humanos necesitamos para solucionar o salir adelante en las pequeñas cosas de la vida, a las que todos, de alguna manera, nos enfrentamos.

Cristina Vicente Alonso

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